Día 23.

"El sepulcro, la muerte y los ojos del hombre jamás se dan por satisfechos" Proverbios 27,20

Hoy en día, la tentación está en todas partes y si crees que nosotras o nuestros esposos no pueden ser seducidos, déjame decirte que estás equivocada!

Razón por la cual siempre hay que estar alertas y siempre agarradas de la mano de Dios.

Algunas tentaciones pueden ser al alcohol, drogas, poder, dinero, juego, comida, pornografía o infidelidad.

El enemigo conoce todas nuestras debilidades y pondrá tentaciones irresistibles a nuestro paso.

Aquí la recomendación es orar.

La oración puede o no detener a un hombre de hacer algo que él está determinado a hacer, pero Sí puede disminuir las voces de la tentación y fortalecer su resolución.

Puede poner el camino para que se tomen las decisiones correctas.

Dios no nos tienta, son nuestros deseos que nos hacen caer, pero:

"Dichoso el que resiste la tentación porque, al salir aprobado, recibirá la corona de la vida que Dios ha prometido a quienes lo aman" Santiago 1,12

Dios siempre te dará la salida si la deseas de corazón.

El mejor momento de orar, es ANTES de que algo suceda.

Reto

Si tu esposo está pasando por un mal momento:

• Ora, para que se sincere con Dios y acepte ayuda, pide con todo tu corazón, puede que pases por todo un sufrimiento y un calvario, pero sabes que viene después de todo esto? La RESURRECCIÓN, la luz!!
• No dejes de hacer oración por él. No importa lo desesperado que luzca cuando lo veas en esa mala situación, tú puedes ser el instrumento que Dios usará para ayudarlo.

Si no hay problema de tentación en tu matrimonio, da gracias y pídele a nuestra aliada la Santísima Virgen que interceda para que no caigan en tentación y los aleje de cualquier persona o situación que los pueda destruir.

Querida Madre, te pedimos por nuestro esposo, aléjalo de toda tentación y acércalo a Tu Hijo Jesús.